Conocí a Leo una mañana de fines de julio de 2016. En ese entonces, él ya publicaba artículos en LinkedIn pero a partir de ese momento esa actividad se convirtió en una rutina (de las lindas) de cada domingo. Así, semana tras semana, conversamos juntos los temas de sus artículos y lo ayudo en la edición de cada uno de ellos.
Y, después de más de dos años de trabajo juntos, Leo ingresó en la lista de «Top Voices», de LinkedIn. Una felicidad y un orgullo de que Leo haya podido concretar uno de sus objetivos, ser parte de esta lista de «influencers» que aún no existía para el idioma español.